Bogotá, 06 de mayo de 2009
En el día de ayer se realizo en el capitolio nacional el homenaje a las víctimas de la violencia en nuestro país. En el recinto se pudo escuchar tanto los testimonios de importantes personalidades, como el de cientos de personas en representación de los miles de nacionales de a pie que han sido víctimas de un conflicto que no parece cesar en Colombia.
Dentro de la sensación generada en la sociedad se encuentra que existen dos fenómenos adicionales que agravan la situación, ellos son la impunidad al crimen y la falta de voluntad política para resolver el conflicto.
Los recientes informes oficiales y de entidades no gubernamentales, aunque con cifras ampliamente diferentes entre unos y otros, muestran niveles alarmantes de impunidad por parte del sistema judicial colombiano, dentro de los cuales se encuentran represados infinitos casos de violencia realizados por elementos “pro” y al margen de la ley, sin que hasta la fecha hayan dictaminado justicia para las víctimas.
En cuanto a la resolución del conflicto la situación tampoco muestra un panorama alentador. Para mencionar un ejemplo, las necesidades planteadas por las distintas organizaciones de victimas del secuestro aun no han encontrado eco en sus plegarias al ejecutivo nacional para agilizar la liberación de los plagiados. En estos precisos momentos se vive una de las coyunturas mas importantes en cuanto al tema del secuestro en Colombia, la cual concierne con la liberación del soldado Pablo Emilio Moncayo.
Dicha liberación se encuentra estancada por una ausencia de voluntad, no de tipo político, sino humanitario de buscar los mecanismos que permitan traer a la libertad a este conciudadano que lleva 11 años de su vida privado injustamente de su libertad.
Por eso se hace urgente que la sociedad civil, representada en cada uno de sus miembros que somos todos nosotros, expresemos la necesidad imperiosa de construir los mecanismos que permitan la liberación del cabo Moncayo y de los cientos de colombianos y colombianas que permanecen cautivos en las selvas de nuestro país. Esta es una demanda mundial que debe ser tratada como es, no como un show mediático, ni como interés de campaña electoral que beneficia a uno u otro, sino que se trata de volver a la vida a tantos compatriotas que los gobiernos y la sociedad han olvidado.
Por eso, en homenaje a las víctimas, exijamos que la liberación del soldado Moncayo sea destrabada lo más pronto posible, ya que este país no aguanta más violencia, por eso el homenaje a las víctimas es un homenaje a todos los que hemos nacido en este territorio distanciado de la paz.
FABIAN RICARDO PERTUZ PEÑA-
Colectivo Ambiental Verde Pacifico.
Dentro de la sensación generada en la sociedad se encuentra que existen dos fenómenos adicionales que agravan la situación, ellos son la impunidad al crimen y la falta de voluntad política para resolver el conflicto.
Los recientes informes oficiales y de entidades no gubernamentales, aunque con cifras ampliamente diferentes entre unos y otros, muestran niveles alarmantes de impunidad por parte del sistema judicial colombiano, dentro de los cuales se encuentran represados infinitos casos de violencia realizados por elementos “pro” y al margen de la ley, sin que hasta la fecha hayan dictaminado justicia para las víctimas.
En cuanto a la resolución del conflicto la situación tampoco muestra un panorama alentador. Para mencionar un ejemplo, las necesidades planteadas por las distintas organizaciones de victimas del secuestro aun no han encontrado eco en sus plegarias al ejecutivo nacional para agilizar la liberación de los plagiados. En estos precisos momentos se vive una de las coyunturas mas importantes en cuanto al tema del secuestro en Colombia, la cual concierne con la liberación del soldado Pablo Emilio Moncayo.
Dicha liberación se encuentra estancada por una ausencia de voluntad, no de tipo político, sino humanitario de buscar los mecanismos que permitan traer a la libertad a este conciudadano que lleva 11 años de su vida privado injustamente de su libertad.
Por eso se hace urgente que la sociedad civil, representada en cada uno de sus miembros que somos todos nosotros, expresemos la necesidad imperiosa de construir los mecanismos que permitan la liberación del cabo Moncayo y de los cientos de colombianos y colombianas que permanecen cautivos en las selvas de nuestro país. Esta es una demanda mundial que debe ser tratada como es, no como un show mediático, ni como interés de campaña electoral que beneficia a uno u otro, sino que se trata de volver a la vida a tantos compatriotas que los gobiernos y la sociedad han olvidado.
Por eso, en homenaje a las víctimas, exijamos que la liberación del soldado Moncayo sea destrabada lo más pronto posible, ya que este país no aguanta más violencia, por eso el homenaje a las víctimas es un homenaje a todos los que hemos nacido en este territorio distanciado de la paz.
FABIAN RICARDO PERTUZ PEÑA-
Colectivo Ambiental Verde Pacifico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario